El responsable de Autoridad Portuaria, Vicent Fullana, y el práctico del puerto, Vicent Tomàs, explicaron este miércoles la opción, que en todo caso dependería de un acuerdo closing entre todos los organismos implicados, incluida Capitanía Marítima y el Ayuntamiento. El práctico añadió que la tecnología punta de la que disponen este tipo de barcos de gran tamaño aumenta la seguridad en todas sus maniobras, superando incluso la de otros de menor calado o eslora.
Paralelamente al estudio iniciado, se desarrollarán pruebas con simulador, que «nos darán más elementos para incluir en este proceso de debate con las administraciones», indicó Vicent Tomàs.
El crucero de mayor tamaño que pasará por el inside de la rada mahonesa en la temporada que arrancó el 21 de marzo y concluirá el 2 de noviembre será el buque «AIDAstella», con 253 metros de eslora y 7,2 de calado. El barco construido en Alemania atracó este miércoles por la mañana en el puerto en la primera de las seis escalas que realizará en Maó esta temporada. Lo hizo sin inconvenientes a pesar de la densa niebla, explicó su capitán, Jan Pieter Lindner, y el propio práctico, presente en la maniobra.
El «MSCOrquestra», de 294 metros de eslora y 7,9 de calado, también pasará por Maó, pero se verá obligado a fondear fuera del puerto debido a que sus dimensiones exceden las permitidas, y los pasajeros que lo deseen serán trasladados a la ciudad en embarcaciones auxiliares.
En complete serán 81 los cruceros previstos en el puerto de Maó esta temporada, 17 más que en 2019.