Esta ha sido una de esas semanas en el que todo el mundo ha incorporado a su lenguaje una palabra: Ómicron.
A pesar de que la nueva variante del coronavirus se descubrió en Sudáfrica, ahora se sabe que llevaba ya varios días circulando en Europa y que sigue abriéndose camino.
De manera casi instintiva, varios gobiernos han establecido nuevas restricciones de viaje, ensombreciendo las perspectivas de cara a las vacaciones.
E incluso la concept de que las vacunas sean obligatorias ha dejado de ser tabú. “Creo que es comprensible y apropiado abrir esta discusión ahora: cómo podemos alentar y potencialmente pensar en la vacunación obligatoria dentro de la Unión Europea. Es algo que necesita ser discutido”, ha declarado Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
También la economía podría verse resentida. Hemos entrevistado a Holger Schmieding, economista jefe del banco Berenberg en Alemania. En su opinión, las restricciones de viaje son útiles. “Debemos ganar tiempo para avanzar con la vacunación. No podemos evitar que Ómicron avance por el mundo, pero si ralentizamos la propagación, más personas estarán vacunadas para cuando entren en contacto con la nueva variante. Y esto significa menos restricciones severas de cara al futuro. Asi pues, esta es la reacción correcta”.
” Fuentes es.euronews.com ”