El delegado territorial de Turismo de la Junta en Córdoba, Ángel Pimentel, ha destacado el “papel clave” del enoturismo para la diversificación de la oferta en la provincia, creando “un producto turístico diferenciador y vinculado a la gastronomía local“, según ha expresado en una visita al Consejo Regulador de Denominación de Origen Montilla-Moriles, donde, además, ha podido conocer alguno de los enclaves que conforman la conocida como ruta del vino Montilla-Moriles.
Según ha puesto de manifiesto la Administración autonómica, “el enoturismo encuentra, sin duda, uno de los mejores destinos en una de las provincias con mayor tradición y dedicación a este cultivo, en Córdoba”.
Desde la Consejería ha añadido, “apostamos por la diversificación de la oferta turística en la provincia, poniendo en valor la cultura del vino, dando a conocer y abriendo nuestras bodegas, entendiendo en todo momento la historia y la elaboración que tienen detrás, con generaciones y generaciones de cordobeses dedicados a la elaboración de estos caldos, que son todo un referente dentro y fuera de Andalucía”.
Pimentel ha asegurado que la Consejería busca que esta tendencia en auge, la del enoturismo, “se consolide como una oferta turística propia y afianzada en el territorio, entendiendo que es necesario apostar por un turismo de experiencias, dando a conocer estas tierras bendecidas por el fruto de la vid donde perviven labores de antaño y oficios artesanales con rasgos artísticos propios. Todo ello visible en cada taller, saga o familia”.
La ruta del vino Montilla-Moriles comprende la comarca que abarca las denominaciones de origen de estos caldos (vinos y vinagres), que suma a los municipios de Aguilar de la Frontera, Córdoba, Fernán Núñez, La Rambla, Lucena, Montemayor, Montilla, Moriles, Montalbán, Monturque, Puente Genil, Doña Mencía, Santaella, Castro del Río, Cabra y Baena. Además, esta iniciativa aglutina a más de 60 empresas, entre bodegas y lagares; tabernas, enotecas y restaurantes; hoteles y alojamientos; ocio y agencias de viajes; y comercios especializados.
“Córdoba es uno de los mejores destinos para el enoturismo, y tenemos que fomentar que en torno al vino se refuerce un tejido turístico y cultural que permita poner en valor la singularidad de la producción vinícola de esta zona que certifica vinos mundialmente conocidos“, ha subrayado el delegado.
Los vinos generosos de la denominación de origen Montilla-Moriles, especialmente los de crianza biológica, constituyen “un mundo aparte dentro del universo de la enología”.
Así, las localidades por las que discurre esta ruta del vino gozan igualmente de “una rica gastronomía basada en los productos de la tierra: la aceituna, la uva, los cereales, el ajo, unidos al poso de las culturas árabe, judía y cristiana que allí dejaron su legado”.
El resultado, prosigue el delegado, “es además una cocina con identidad propia repleta de exquisitas y muy variadas recetas, donde destaca el sabor de estos caldos“. Todo ello conforma “un potencial turístico que hay que apoyar y dar a conocer para reforzar la competitividad y la excelencia de la marca Córdoba”.
” Fuentes www.diariocordoba.com ”