La reactivación del turismo avanza a pasos gigantes. La mejora de la situación sanitaria, la expedición del pasaporte covid y, en última instancia, el lanzamiento de los bonos turísticos por parte del Gobierno de Aragón animan a los aragoneses a viajar y a desplazarse con el objetivo de recuperar la ansiada normalidad, o por lo menos, aproximarse a ella. Tanto es así, que la demanda, o más bien avalancha de solicitudes para acceder a estas cuantías «ha sido algo brutalmente inesperado». «No esperábamos el éxito que ha tenido, mas exagerado de lo esperado», expresó el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Aragón, Jorge Moncada.
Estos negocios son los encargados de gestionar estas ayudas y aplicar el descuento directamente al usuario y, debido a esta elevada demanda de solicitudes, la labor del sector en Aragón «ha sido muy trabajosa» porque las agencias «han hecho un gran esfuerzo para gestionar con tanta rapidez las solicitudes», añadió Moncada. En este sentido, este señaló que, en el caso de su negocio, ha servido para sacar ya «a una persona del erte» para afrontar todo el trabajo que se les viene encima, algo que se prevé sea lo ordinary en el resto de agencias de viajes aragonesas.
En apenas 48 horas desde la convocatoria de los bonos turísticos, el Departamento de Industria del Gobierno de Aragón recibió 5.000 expedientes de solicitud. El primer periodo de ayudas –que cubre viajes hasta el 31 de julio– se cubrió en horas y se dejaron de emitir códigos promocionales. Una semana después, «no se pueden admitir más bonos porque se ha llegado al máximo», informaron desde la DGA, aunque las previsiones reflejan que «lo previsible es que se canjeen todos». Habrá una segunda oportunidad, desde el 25 de agosto, cuando se podrán empezar a solicitar las ayudas para la segunda fase, que cubren el periodo de septiembre a diciembre con las mismas condiciones para los bonos turísticos.
Más de 55.000 ‘pasaportes covid’ solicitados gracias a la vacunación
El ritmo acelerado de la vacunación permite mirar con optimismo al futuro y organizar unas vacaciones en el extranjero, algo que haces meses period impensable. Para cruzar las fronteras nacionales es necesario disponer del pasaporte covid. Con esa intención o no, lo que está claro que los aragoneses buscan ese documento que acredite que están vacunados o han pasado el virus en algún momento. Hasta el viernes pasado (últimas cifras ofrecidas por el Gobierno de Aragón) se habían solicitado 55.556 documentos.
33 El pasaporte covid puede ofrecer información sobre tres aspectos. En primer lugar, si la persona solicitante se ha hecho un check de detección del virus y arroja un resultado negativo. En este caso, se han tramitado hasta ahora 420 documentos. La segunda de las situaciones está relacionada con haberse infectado en algún momento por el covid-19 y, después, haberse recuperado. En este caso, son 1.700 pasaportes covid los que se han tramitado desde el Gobierno de Aragón. Y el tercero de los casos está relacionado con la vacunación y refleja si la persona solicitante ya está inmunizada o no. Se trata de la característica que más se repite en la expedición de estos documentos sanitarios, que hasta el viernes de la semana pasada alcanzaba ya la cifra de 53.434 pasaportes.
Estas ayudas, impulsadas por el Ejecutivo autonómico con la colaboración de las diputaciones provinciales y que cuentan con una partida de 1,5 millones de euros, pueden subvencionar hasta el 40% de las estancias de al menos dos noches contratadas con agencias de viajes de la comunidad autónoma. Las ayudas máximas a las que pueden optar los solicitantes son de 300 euros, y hasta ahora, informó Moncada, la media de estas aportaciones está siendo de 80 euros por bono turístico concedido o tramitado.
Abiertas las listas de espera
El éxito de la iniciativa puesta en marcha por el departamento que lidera Arturo Aliaga es rotundo. Es por esta razón que hace una semana desde el Gobierno de Aragón señalaron que las listas de espera para solicitar estas ayudas se iban a abrir. Siete días más tarde, el presidente del sector de las agencias de viajes aragonesas informa de que hay 1.000 personas en la cola para optar a ayudas que costeen en parte sus vacaciones por el territorio aragonés. «Quiere decir que el dinero previsto supera con creces las peticiones y que ese dinero se queda corto», recalca Jorge Moncada.
Por otro lado, el camino no ha sido fácil. Esa oleada de solicitudes que han agotado los bonos turísticos del primer periodo subvencionable ha generado problemas y saturación por el camino. De hecho, las agencias de viajes han tenido que redoblar esfuerzos en la gestión de las ayudas, en una época en la que se juntan el comienzo del periodo estival y también la contratación de viajes al extranjero que se reactivan después de la pandemia. «Ha habido problemas técnicos con las reservas pero se han subsanado con más agilidad por el esfuerzo del sector», recalcó Moncada.
Aire fresco
Los bonos turísticos han llegado en el mejor momento, en una época en la que la vacunación avanza a gran velocidad y se permite ya una mayor libertad social. Periodo, por tanto, de reactivación económica y turística, que aun con el posible miedo de viajar al extranjero en el aire o las restricciones de los países de destino, posibilita descubrir rincones aragoneses. El fomento del turismo native. «Estamos muy contentos, porque además los establecimientos hoteleros que usan los bonos, lo hacen para reactivar su situación», apostilló el presidente de la asociación.
Los destinos más destacados, el Pirineo y el Matarraña
Los bonos turísticos impulsados por el Gobierno de Aragón prevén sufragar el 40% del coste de la pernoctación en alojamiento turístico en la comunidad, o también puede sufragarse la manutención en el alojamiento, como máximo de media pensión y con exclusión de bebidas alcohólicas. Los servicios de salud y bienestar, servicios deportivos y excursiones, prestados a través del alojamiento, también podrán incluirse en la factura. Por el momento, los lugares más demandados por los aragoneses están siendo el Pirineo, la zona del Matarraña y zonas como la de Calatayud en Zaragoza, con el atractivo del Monasterio de Piedra o el tirón muy fuerte del vino o el golf, según el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Aragón, Jorge Moncada.
La iniciativa turística de la DGA prevé también sufragar las entradas a parques temáticos y estaciones de esquí, aunque se excluyen balnearios y centros termales. En este sentido, Teruel es una de las zonas con más peticiones por el parque Dinópolis.
” Fuentes www.elperiodicodearagon.com ”