«El año 2022 tendremos la nueva terminal de cruceros nueva; es cuando tengamos un escenario de normalidad», ha destacado Cruset. En el 2019, el puerto de Tarragona recibió a 128.089 pasajeros y atracaron 57 cruceros. Con respecto al 2020 sólo llegaron 1.463 cruceristas en un barco.
Preguntado sobre el traspaso de las competencias portuarias, el vicepresidente ha asegurado que no renunciarán a alcanzar la máxima soberanía. «Desde siempre aspiramos a las máximas cuotas de autogobierno, es un gobierno que representa el 52% de la población que quiere a la soberana máxima de este país, por lo tanto, mientras no conseguimos este propósito, eso no nos tiene que hacer renunciar a conseguir la soberanía por partes; valoraremos cómo la hacemos efectiva durante los próximos meses», ha manifestado.
Asimismo, las autoridades han recordado los 150 millones de euros del plan de inversión del puerto que incluye la construcción de nuevas infraestructuras y la mejora de otros ya existentes. «Estamos en un momento clave del puerto de Tarragona porque muchos de los proyectos relevantes confluirán en el 2023, este horizonte nos permitirá ser un nodo logístico en Europa y en la mediterránea», ha apuntado a Cruset. En este sentido, ha recalcado el impulso económico que supondrá la entrada en funcionamiento del corredor mediterráneo y del túnel del Coll de Lilla.
También ha destacado la puesta en marcha en pleno rendimiento de la Zona de Actividades Logísticas, la terminal Intermodal de la Boella y la terminal de Guadalaja-Marchamalo, que permitirá extender el área de influencia del puerto tarraconense hasta el centro de la península Ibérica.
Aparte, el vicepresidente Puigneró se ha reunido con una cincuentena de representantes del tejido empresarial del Camp de Tarragona en el Tinglado 1 del Moll de Costa. En la reunión se han expuesto los retos de futuro y las oportunidades que tendrá el puerto y el territorio con la mejora de las infraestructuras ferroviarias.
” Fuentes www.diarimes.com ”
