La tensión entre israelís y palestinos ha escalado grandes niveles de violencia los últimos días dejando decenas de muertos en la Franja de Gaza e Israel.
En medio de los constantes ataques y bombardeos, el ejercito israelí ha logrado interceptar 850 misiles de los más de mil proyectiles lanzados por militantes de Hamas desde la Franja de Gaza. Esto gracias a un escudo llamado Domo de Hierro, ¿cómo funciona?, a continuación te lo explicamos.
El Domo de Hierro, también conocido como Cúpula de Hierro, fue diseñado por la compañía Rafael Superior Protection System LTD y tiene el objetivo de proteger al país de misiles balísticos, misiles cruceros, cohetes y otras amenazas aéreas.
La compañía ha señalado que se trata de el sistema antimisil más desplegado en el mundo y que es efectivo en más del 90% de los casos.
Las baterías del Domo de Hierro están hechas de misiles interceptores, radares y sistemas de comando que analizan dónde pueden caer los cohetes enemigos.
Gracias a su tecnología del radar, el sistema identifica qué misiles deben ser interceptados, pues este, diferencia entre misiles que pueden llegar a zonas urbanas y los que fallan su blanco.
Los interceptores son lanzados verticalmente desde unidades móviles o estáticas y posteriormente detonan los misiles en el aire.
En 1986 Israel firmó un contrato con Estados Unidos para llevar a cabo una investigación sobre sistemas antibalísticos como parte de un proyecto de la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI) de la administración de Ronald Reagan.
Cinco años después, cuando el presidente iraquí Saddam Hussein ordenó lanzar misiles Scud sobre Israel durante la Primera Guerra del Golfo, los líderes israelís aceleraron sus esfuerzos para desarrollar este sistema.
En 2010, el Domo de Hierro, pasó con éxito las pruebas realizadas por el ejército israelí y fue hasta abril de 2011 cuando el Domo de Hierro fue probado en combate por primera vez cuando derribó un misil lanzado contra la ciudad de Beerseba, ubicada al sur del país.
Con información de BBC Information.
” Fuentes www.elfinanciero.com.mx ”