Rabat tiene intención de permitir que, este próximo verano, los marroquíes residentes en el extranjero puedan regresar a su país por vacaciones. Sin embargo, nada ha adelantado sobre los puertos, aeropuertos o fronteras terrestres que se habilitarán para recibir a sus más de tres millones de súbditos expatriados que llevan casi dos años sin visitar a las familias.
Según ha comprobado Confidencial Digital, responsables públicos de Ceuta y Melilla se temen lo peor: que las dos ciudades sean excluidas del dispositivo.
Marruecos lleva desde 2018 poniendo en práctica políticas que asfixian la economía de esas dos ciudades autónomas españolas en beneficio de sus propias empresas y presupuesto nacional, como ha llegado a reconocer.
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Cierre por la pandemia
El cierre common de fronteras marroquíes el pasado 2000 a causa de la pandemia impidió la celebración de la Operación Marhaba (nombre que da Marruecos al dispositivo público de atención a la llegada masiva y estival de sus trabajadores en el extranjero) y, con ello, la entrada de un apreciable contingente humano que reactiva la economía cada verano con sus desplazamientos por todo el país, alto nivel de consumo, celebraciones familiares, inversión en bienes inmuebles, and many others.
A pesar del riesgo epidemiológico que puede suponer la entrada en el país de una cuantiosa masa de emigrantes procedentes, en muchos casos, de países europeos con alta incidencia de Covid, el Gobierno de Marruecos no quiere desaprovechar el impulso económico que ello va a generar.
Los envíos de remesas desde el extranjero se han visto mermados a causa de la difícil situación laboral de muchos marroquíes que trabajan en países de Europa, y la disaster del turismo ha dejado en el paro al 5% del complete de los empleados en Marruecos.
Con todo, una fuente próxima al ejecutivo marroquí reconoce que Rabat contempla la posibilidad de “limitar los pasos fronterizos durante la próxima Operación Marhaba”. Así lo ha venido haciendo desde que abrió sus fronteras en julio de 2020 hasta el pasado mes de marzo, admitiendo barcos de pasajeros desde dos únicos puertos europeos: Sète (Francia) y Génova (Italia).
Más conexiones aéreas
Aerolíneas como Ryan Air y Air Arabia Maroc han incrementado en los últimos meses sus conexiones entre España y Marruecos, seguramente conscientes de la alta demanda de viajeros que van a encontrar.
La low-cost irlandesa inaugura este verano vuelos desde Málaga hacia Fez y Rabat. Por su parte, Air Arabia Maroc, de capital mixto marroquí-emiratí, acaba de abrir nuevas rutas desde Bilbao, Valencia, Málaga y Barcelona a diferentes destinos marroquíes. Ya ha puesto billetes a la venta a partir del 25 de abril, a pesar de la precise e indefinida suspensión de las conexiones aéreas marroquíes con España y Francia.
España deba dar permisos
España también tendrá mucho qué decir sobre la Operación Paso del Estrecho (OPE). Deberá autorizar a cruzar la Península desde los Pirineos hasta Algeciras, Tarifa, Málaga, Motril o Almería, a los migrantes motorizados que vengan de otros países de Europa.
El Gobierno de Pedro Sánchez también tendrá potestad para exigir las condiciones de reingreso en España de los marroquíes que hayan concluido las vacaciones en su país. Con esas cartas podrá negociar con su vecino sureño si acepta o no una OPE con las fronteras de Ceuta y Melilla excluidas del tránsito.
Como constatan los datos, cada verano, son más numerosas las familias marroquíes residentes en Europa que optan por dejar el coche en el garaje y viajar a su país en avión, evitando de ese modo perder días de vacaciones en desplazamientos por carretera, y ahorrándose los elevados costes de repostajes, peajes de autopistas y pasajes de ferry (solo entre Algeciras y Tánger Med, la ida y vuelta de un vehículo con cinco pasajeros supera los 500 euros).
760.000 vehículos
En 2019 cruzaron el Estrecho de Gibraltar durante la OPE 760.000 vehículos. Por Ceuta pasaron unos 300.000 marroquíes, lo que se tradujo en más de 1,2 millones de euros recaudados solo en tasas portuarias en esa ciudad.
Las pérdidas para las agencias de viaje y negocios de alimentación del entorno portuario de Ceuta, en caso de ser excluida de la OPE 2021, equivaldrían en algunos casos al 50% de todos sus ingresos anuales.
Las navieras del Estrecho, que serían las empresas más perjudicadas, ya presionan al Gobierno de España para que exija a Marruecos la apertura del Tarajal, el paso fronterizo entre Ceuta y Marruecos, durante la próxima OPE. Si no lo lograra, amenazan con tener que incrementar considerablemente el precio de sus billetes durante el resto del año para compensar las pérdidas veraniegas.
Agencias de viajes
Las agencias de viajes solo de Algeciras generan casi cien empleos. El representante de la patronal, Juan Parada, sospecha que “Ceuta va a quedarse fuera de la OPE, igual que pasará, al menos en un primer momento, con la conexión Tarifa-Ciudad de Tánger”.
Tanto para este profesional como para otros del sector, Marruecos querrá evitar el embudo en que puede convertirse una frontera como la del Tarajal, en una situación tan excepcional como la que se espera este verano. El nuevo puerto de Tánger-Med sí cuenta con espacio para albergar los equipamientos de management sanitario necesarios para recibir, como en 2019, hasta 22.000 pasajeros diarios.
Mientras puertos, ayuntamientos y transportistas permanecen expectantes ante las próximas decisiones del Gobierno de Marruecos, todo permanecerá, en cualquier caso, condicionado a la evolución de la pandemia en los próximos meses. De los buenos datos en Europa y Marruecos dependerá que la palabra marhaba (bienvenido) se pronuncie este verano en los puertos marroquíes.
” Fuentes www.elconfidencialdigital.com ”
