El Eibar inicia en Valdebebas su explicit cuenta atrás hacia la salvación. Independientemente de quién sea el rival, el cuadro armero necesita empezar a sumar todos los puntos posibles para alcanzar una nueva permanencia, aunque lógicamente el hecho de que sea el Actual Madrid el que esté enfrente añade a la misión una dificultad extrema, y más cuando los de Mendilibar llevan once jornadas consecutivas sin poder ganar a nadie.
A los propios males que arrastran los eibarreses desde que festejaron su última victoria el pasado 3 de enero ante el Granada, hay que añadir no solo que nunca han podido salir victoriosos del feudo blanco, sino también que los madridistas, situados a seis puntos del Atlético, quedarían prácticamente descolgados de la lucha por el título justo antes de jugarse su pase a las semifinales de la Liga de Campeones. Por no mencionar que dentro de nueve días les espera la visita de un Barcelona deseoso de vengar el 1-3 de la primera vuelta en el Camp Nou.
De esa vorágine que rodea a los de Zidane pretende el Eibar pescar la ilusión que le mantenga vivo en una competición en la que le esperan fuertes emociones en todos y cada uno de los diez partidos que restan.
El equipo dirigido por José Luis Mendilibar solo ha sumado ocho puntos en este 2021, pero los azulgranas se han esforzado por convencerse y convencer a su parroquia de que el último choque disputado en San Mamés, justo antes del parón, fue el punto de inflexión que venían buscando sin éxito hasta la fecha.
El conjunto guipuzcoano ha preparado con todo el esmero del mundo el partido, aunque en los entrenamientos no ha podido contar con dos de sus principales puntales: Bryan Gil, citado con la absoluta y que será la gran amenaza para la zaga madridista, y Dmitrovic, presente sobre el campo en dos de los tres partidos disputados por Serbia. Tanto el guardameta como Pozo, concentrado con la sub-21, se incorporaron ayer al grupo, mientras que está previsto que el Barbateño se una hoy a sus compañeros para participar en la única sesión que falta antes de viajar a Madrid.
No es posible, sin embargo, incluir en esta previa el estado de los jugadores que arrastraban lesiones. Tanto la comparecencia de Mendilibar como la convocatoria para al choque de mañana se han postergado al día de hoy, Viernes Santo. Entre los renqueantes de los últimos días, Muto, Correa y Cote, todos menos Pedro Bigas, apuran la compra de billetes para viajar a Madrid junto al resto de la expedición armera.
En cualquier caso, no parece que ninguno de los tres tenga muchas opciones de figurar en un as soon as en el que la gran novedad podría ser Expósito, ausente del equipo en las dos últimas citas. Eso, claro está, si el de Zaldibar no opta por recuperar su sistema con dos delanteros, el que tradicionalmente le ha reportado los mayores éxitos, aunque esta temporada no es precisamente el que mejor le está funcionando.
Con los que sea y como sea, el Eibar necesita reeditar sus mejores momentos en este campeonato, que llegaron precisamente con su histórico primer triunfo en el Sánchez Pizjuán y poco después con otra victoria en el Benito Villamarín, hace ya cuatro eternos meses.
Bajas en el bando blanco
Este partido tampoco le llega en un gran momento al Actual Madrid. El trece veces campeón de Europa ha visto cómo, sin apenas jugar, vuelve a perder a su capitán, Sergio Ramos, al que una lesión en el gemelo le dejará sin participar en este tramo clave. También se antoja complicada la vuelta de Carvajal, que apura su recuperación y cuyo regreso parece estar más centrado para el choque contra el Liverpool. Odriozola, Marcelo y Militao podrían ser titulares en una renovada defensa.
Las peores noticias proceden del centro del campo, donde Zidane no dispone de demasiados efectivos. Valverde quedó tocado tras la victoria ante el Celta y desde entonces no se ha entrenado con el equipo, mientras que Kroos tuvo que abandonar la concentración de la selección de Alemania y Modric pide descanso a gritos.
” Fuentes sdeibar.diariovasco.com ”