Escenario de patrimonios vivos y naturales, la región del Libertador Bernardo O’Higgins refleja lo profundo de las costumbres chilenas. Conozca siete experiencias inolvidables a sólo dos horas de Santiago de Chile.
Valles de O’Higgins es una tierra fértil que invita a redescubrir aromas, sabores y disfrutar de las tonalidades verdes y tierra que enmarcan los mejores parajes para desarrollar exquisitos vinos, buenos productos y espacios únicos.
Además, en tiempos de pandemia son una buena elección ya que son destinos poco concurridos, con muchos espacios al aire libre y que cuentan con todos los protocolos de bioseguridad.
Descubra siete experiencias inolvidables a sólo dos horas de Santiago, en una zona que sorprende por su enoturismo.
1. El misterio de la alquimia
Dentro de la Viña Alchemy se lleva a cabo una alquimia perfecta, que transforma la uva, en vino, en magia.
“Esta bodega boutique se dedica a elaborar vinos de un estilo artesanal, pero de alta calidad. Para intervenir lo menos posible, no se usan máquinas, cada racimo es degradado a mano”, detalla Eduardo Camerati, socio y gerente de Viña Alchemy.
El 2017 participaron en Catad´Or Wine Award, el concurso de vinos más importante de Latinoamérica, y su carmenere se posicionó como el mejor de Chile.
2. Experiencia acquainted
Ovejas, chivos, conejos, gansos y avestruces silvestres te reciben cuando llegas a Viña Casa Acosta. Todo el proceso productivo de sus vinos se realiza manualmente en cada una de sus etapas: maceración, fermentación, descube y prensado, filtración y envasado.
Una viña con ediciones limitadas y de autor, donde esperan generar un espacio para aprender, disfrutar, compartir y divertirse. Los anfitriones lo guían en la experiencia.
3. Vuelve a encantarte
A diferencia de otras viñas, donde la horizontalidad y planimetría marcan un paisaje cuadricular, en Viña El Encanto el paisaje es elevado, serpenteante, expuesto al sol, resguardado bajo la sombra. La naturaleza combina sus texturas entre viñedos, arbustos, plantas y árboles.
“La influencia de la cordillera hace vinos más frescos”, describe Fernando Farías, gerente de Viña El Encanto.
Un detalle que sorprende a muchos de los visitantes: disfrute de cuatro fuentes de agua mineral curativa inscrita, que corren por entremedio de los cerros. Las capturan, las ponen en un tranque y riegan con esa agua.
(Lea también: Colombia ahora es miembro de la principal red empresarial en turismo de lujo)
4. La energía de la naturaleza
¡Como estar en casa! Viña TreMonte se encuentra plantada en las precipitadas laderas del Monte Rekewa. Se vive un ambiente grato con la naturaleza como lienzo de fondo. El bosque esclerófilo es reconocido a nivel nacional y su fauna se descubre en la medida que va recorriendo el campo.
Viña TreMonte está situado en un lugar muy estratégico: rodeado de cerros, ríos y canales, permitiendo que los huéspedes se sientan muy cómodos.
Programe su visita para algunos días. No querrá perderse esta oportunidad de descanso en este espacio y degustar directamente en las cubas (bodegas) los tres vinos más emblemáticos: Merlot, Cabernet Sauvignon y Syrah.
Espacios únicos
5. El mundo de las colmenas
Descubrir el maravilloso mundo al inside de las colmenas, su aroma, las castas y su sigiloso trabajo. La Casa de la Miel recibe a familias, parejas y amigos para vivir una experiencia en terreno que enseña sobre la importancia de estos misteriosos insectos.
“Se invita a los visitantes a vestirse con un traje de apicultor. Les enseñamos a identificar las abejas obreras, zánganos y reina; reconocer los olores de néctares y pólenes, a escuchar los zumbidos y la comunicación entre ellas”, explica Mónica Rodríguez, su fundadora.
También cuentan con una completa tienda, donde puedes comprar una gran variedad de productos de su marca Monimony, néctares que curan el cuerpo y el alma. Casa de la Miel ha ganado tres premios nacionales a la mejor miel del país.
(Lea también: Machu Picchu reabrirá el lunes con aforo de 40 %)
6. Renovar energías en el campo
La Ruta de los Soles es una zona protegida y privilegiada, donde crecen frondosas palmeras, un césped que incita a caminar descalzo y un bosque con olor a eucalipto.
Una oferta turística exclusiva que permite celebrar cualquier evento -matrimonio, cumpleaños, bautizo- con comodidad (destacan sus amplios salones y piscinas), whole tranquilidad y seguridad de la mano de los anfitriones, que se preocupan de cada detalle.
7. El sur de Chile a dos horas de Santiago
Shangri-La Lodge cuenta con alucinantes cabañas restauradas en medio del bosque y al lado del río Claro. Sorprende con un concepto arquitectónico que mezcla piedra y madera dentro de un espacio pure no intervenido, con diversas aves, animales, senderos naturales marcados, con mucha lavanda, rosas y eucalipto.
No puede dejar de vivir la experiencia de sumergirse en sus tinajas de agua caliente de vertiente, con muchos minerales, que llevan a una relajación whole. O, para estar más en movimiento, cabalgar, pasear por el río o caminar en el bosque nativo.
” Fuentes www.elespectador.com ”