Bandera de Estados Unidos de Norte América ondea en Cuba

*John Kerry, dijo sentirse “como en casa”

 

Luego de ingresar a la embajada estadounidenseEl secretario de Estado de los Estados Unidos, John Kerry, dijo sentirse “como en casa” luego de ingresar a la embajada estadounidense en la isla para llevar a cabo el izamiento de bandera, aunque no dejó de mencionar que no se puede olvidar el pasado y confió en que el congreso de su país apruebe el desbloqueo. 

"Este es el momento de acercarnos como dos pueblos; ni enemigos ni rivales, sino vecinos. Es el momento de desplegar nuestras banderas, enarbolarlas y hacerle saber al resto del mundo que nos deseamos lo mejor los unos a los otros", externó Kerry en idioma español. 

El funcionario salió en punto de las 10:00 horas a la explanada del patio de la representación diplomática para llevar a cabo el izamiento de bandera de la Unión Americana tras 54 años del rompimiento de las relaciones, en enero de 1961. 

 

 

A las 9:39 horas llegó a las oficinas de la embajada de su país en un vehículo negro acompañado por una fuerte comitiva. 

Descendió del auto y apoyado en su bastón se dirigió al inmueble donde se encontraban unos dos centenares de invitados especiales y medios de comunicación.

El edificio que por 54 años permaneció como oficinas de trámites hoy luce nuevamente con el nombre de "Embassy of the United State of America", Embajada de Estados Unidos de América, y con la bandera de la barra y las estrellas. 

En calles aledañas cientos de personas presenciaron el momento histórico que se vive y observaron el asta que se encuentra en el patio nuevamente con una bandera de los Estados Unidos. 

John Kerry mencionó que ese acto es el símbolo de las relaciones diplomáticas después de 54 años y se trata de la primera vez que un secretario de estado norteamericano ha visitado Cuba desde 1945. 

"Me siento en casa", dijo a los presentes tanto dentro como fuera de la embajada y remarcó que "se trata de una ocasión conmemorable, porque es un día para olvidar viejas barreras y explorar nuevas posibilidades. 

“Es en ese espíritu que les digo a nombre de mi país que los Estados Unidos acoge con beneplácito este nuevo comienzo de su relación con el pueblo y el gobierno de Cuba. 

"Sabemos que el camino hacia unas relaciones plenamente normales es largo, pero por ello tenemos que empezar en este mismo instante, no hay nada que temer, ya que serán muchos los beneficios de los que gozaremos cuando permitamos a nuestros ciudadanos conocerse mejor, visitarse con más frecuencia, realizar negocios de forma habitual, intercambiar ideas y aprender los unos de los otros", expuso.

El funcionario estadounidense mencionó que los presidentes de Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, tomaron una decisión valiente al dejar de ser “prisioneros de la historia” y enfocar las oportunidades del hoy y el mañana.

 Recordó que en 1959 el comandante Fidel Castro fue a su país donde fue saludado por multitudes y luego regresó al año siguiente para la asamblea general de la ONU.

 Mencionó que en octubre de 1962 surgió la crisis de los misiles que llevaron a 15 días de tensiones en todo el mundo, lo que llevaba al umbral de una guerra nuclear, entonces los vínculos diplomáticos entre Cuba y Estados Unidos se veían bajo tensión.

 Por medio siglo, refirió, las relaciones han estado suspendidas en el ámbito de la política de la guerra fría, toda una generación de americanos y cubanos ha crecido y envejecido, en tanto Estados Unidos ha tenido 10 presidentes.

 Kerry mencionó que durante todos esos años la población dejó de beneficiarse de las nuevas tecnologías y ha llegado el momento de restablecer las políticas.

 Opinó que el pueblo de Cuba hubiera estado mejor con una democracia genuina para expresar sus ideas, escoger a sus líderes y practicar su credo, donde el compromiso hace a la justicia social y económica.

 "Quiero ser claro: el establecimiento de relaciones diplomáticas normales no es un favor que hace un gobierno a otro, es algo que dos países hacen juntos para que los ciudadanos de ambos se beneficien; en este caso la reapertura de nuestras embajadas es importante de persona a persona y de gobierno a gobierno", aseguró Kerry.

 Subrayó que ante todo será útil para el pueblo de ambas naciones saber más los unos de los otros, conocerse, encontrarse, lo que alienta que los viajes de los Estados Unidos ya aumentaron en 35 por ciento y sigue creciendo.

 Asimismo refirió que empresas norteamericanas están llegando a Cuba para explorar las oportunidades de plantarse y crear así fuentes de trabajo para la población y que las empresas de telecomunicaciones e internet ya están viendo las oportunidades para también instalarse.

 Reiteró que se han tomado pasos para reducir las restricciones de las remesas, importaciones y exportaciones para ayudar a los emprendedores cubanos en el ámbito de telecomunicaciones y los viajes de familia.

 El secretario de Estado felicitó a los líderes de América y al Papa Francisco, quienes apoyaron para que se restablecieran las relaciones bilaterales y aplaudió la decisión del presidente Obama y de Castro.

 Hizo un tributo al pueblo de Cuba y a la comunidad cubana-americana en Estados unidos pues, como dijo José Martí, "todo lo que divide a los hombres es un pecado contra la humanidad".

 Después del discurso los infantes de Marina de Estados Unidos Larry, Mikey y Traicy entregaron la bandera que ondeará desde hoy en el asta de la embajada.

  Esos marinos fueron quienes en 1961 bajaron la bandera, la doblaron y la guardaron al romperse las relaciones mutuas.

  Desde muy temprano estadounidenses de una banda de música amenizaron el acto e interpretaron melodías típicas de Cuba como "Guantanamera" y "Mambo número 8".

 Poco antes de ese acto John Kerry se reunió en el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, con quien conversó a puerta cerrada..