Lujo, poder, sofisticación y elegancia; el mármol es uno de los motivos decorativos predilectos no sólo en arquitectura y escultura, sino también en moda y tecnología

La cultura clásica nos dejó un gran legado político, cultural y artístico. Sin duda, obras arquitectónicas como el Partenón o el Erecteion en la Acrópolis de Atenas; y escultóricas, como el Discóbolo de Mirón o El David de Miguel Ángel, son símbolos de la grandeza de una civilización, pero también de la importancia que ellos atribuían a esta roca magna por su perdurabilidad y dureza.

En línea con estos valores y elementos constructivos, se diseñaron obras en nuestro país como el palacio de Bellas Artes o el monumento funerario en honor a Benito Juárez, el cual está desarrollado en su totalidad con el valioso mármol blanco de Carrara.

“En la antigüedad se utilizaba como el material más precioso para construcción y se volvió en símbolo páter en nuestro léxico, como un elemento pétreo presente en los objetos que han estado ahí siempre, en los templos, en las iglesias, así como en los edificios civiles importantes”, explica Lorenzo Díaz Campos, experto en diseño de interiores y socio director de la agencia Círculo Cuadrado.

El mármol era difícil de poseer y sólo los que ostentaban el poder político y económico podían disponer de él, al igual que los diamantes o el oro. Tanto su durabilidad como su exclusividad, hicieron que esta roca tuviera un gran valor intrínseco, perpetuado hasta nuestros días.

“A partir de los años cuarenta, durante el periodo de la posguerra, surgen nuevos materiales como el acero y el cristal, que sustituyen al mármol como material constructivo. No obstante, se mantuvo como motivo decorativo para mobiliario interior y dar un acabado de lujo, como vemos en los lobbies de los rascacielos de la época”, cuenta Lorenzo.

El movimiento posmodernista, iniciado por artistas como Andy Warhol, fue crucial para iniciar el uso de imitaciones de mármol en decoración para objetos de la vida cotidiana y obras de arte con la intención de burlarse de lo clásico y cuestionar los materiales sacros, aunque los acabados no siempre lograban parecer piedra auténtica. En el siglo XXI se perfecciona la técnica hasta el punto que se convierten en sustitutos, aplicados a diversos objetos como bolsos, joyas, vajillas y accesorios tecnológicos.

“La tecnología permite resultados tan reales con características técnicas extraordinarias, que además de ser una alternativa a los recursos pétreos de la naturaleza, que son limitados, conservan el atractivo visual y cultural, así como todos los valores intrínsecos de la roca, cuenta Wes Ng, CEO y cofundador de CASETiFY, empresa especializada en el desarrollo de artículos de tecnología de diseño.

Por eso, CASETiFY, que siempre está a la vanguardia, decidió desarrollar la colección Essential Cases, en la que el clasicismo posmoderno invade los accesorios para convertir los dispositivos tecnológicos en obras de arte elegantes, llenas de lujo y sofisticación, perfectas para toda celebración o evento social.

La colección fusiona resistencia y diseño y se inspira en este material ancestral que logra darle un toque cool a todos los outfits. Las fundas de la línea cuentan con materiales resistentes que ofrecen una protección de 360 grados a prueba de caídas de hasta dos metros de altura.

Los motivos de diseño disponibles son clásicos y el complemento perfecto tanto para ella como para él. Por un lado, la funda con acabado mármol blanco o de Carrara por ser originario de esta zona italiana y universalmente conocido por la pureza de su color. Además, la colección presenta la funda con acabado mármol negro o Marquina, que también es único y característico por su color, oriundo de determinadas zonas europeas como el País Vasco.

Junto con estos modelos minimalistas, sofisticados y versátiles, la línea Essencial Case de CASETiFY presenta también dos diseños con animal print, uno inspirado en la piel de leopardo y otro en el caparazón de tortuga, que al igual que los motivos de mármol, se convierten en un accesorio básico, chic, que nunca pasa de moda.